Es un plato tradicional de los Balcanes y Medio Oriente, pero la versión griega es la más conocida. Se trata de una especie de lasaña de carne, pero en vez de láminas de pasta lleva láminas de berenjena, aunque como siempre cada uno le da su toque especial.
La receta que ofrecemos hoy es la receta básica, pero existen variaciones: a veces sin salsa, a veces con otros vegetales. La más común en Grecia puede incluir calabacines, patatas o champiñones, además de la berenjena. Incluso hay una versión para Cuaresma que omite la carne, sólo vegetales y tomates.
Ingredientes: (2 personas)
2 berenjenas medianas
2 cebollas
200 gr de carne picada
5 cucharadas de salsa de tomate
queso rallado
aceite de oliva
Preparación:
Lavar y cortar las berenjenas en rodajas. Freírlas en abundante aceite y dejarlas escurrir muy bien (yo he optado esta vez por hacerlas a la plancha).
Consejos:
En una sartén sofreir la cebolla, y cuando esté transparente añadir la carne picada y sazonar. Cuando esté todo hecho añadir la salsa de tomate.
En una fuente para horno, colocar una fina capa de bechamel, cubrir con una capa de berenjena y otra de la salsa de carne, otra de berenjena, otra de carne y por último otra de berenjena. Cubrir con la salsa bechamel y espolvorear con el queso rallado.
Meter en el horno precalentado y gratinar hasta que se dore la superficie.
- Para quitar el amargor que puedan tener las berenjenas procedemos a limpiarlas de la siguiente manera: las cortamos en láminas finas y las ponemos en un escurridor, le añadimos sal, y dejamos hasta que suelten el agua, una media hora. Pasado este tiempo, lavamos y secamos.
- El queso original griego se llama “kefalotiri”, pero se puede sustituir por alguno que funda bien.
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